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CABINABUS - UNA PROPUESTA DE MOVILIDAD POSCOVID-19


CABINABUS - UNA PROPUESTA DE MOVILIDAD POSCOVID-19
#Limatopía


Estamos viviendo una época excepcional marcada por la pandemia y el distanciamiento físico, lo que nos esta llevando a una nueva normalidad, con nuevas costumbres en nuestra vivienda, trabajo, educación, esparcimiento, y también en nuestra movilidad.

Para esta nueva etapa en el campo de la movilidad, el Ministerio de Transporte está impulsando la bicicleta y los VMP (vehículos de movilidad personal) como transporte seguro, no solo en Lima sino en diversas ciudades del Perú. Con ello se están planteando nuevas ciclovías y se ha anunciado un modelo de bicicleta económica. Sin embargo, esto solo funciona para recorrer tramos cortos o medianos. Por lo menos, a un corto y mediano plazo, y mientras no tengamos una ciudad verdaderamente policéntrica, las personas que tienen que movilizarse grandes distancias ya sea por trabajos manuales (que no pueden reemplazarse con teletrabajo) u otros motivos, tienen como opción principal el transporte público masivo (corredores, buses, tren) por encima del auto privado que solo es utilizado por un 10% de ciudadanos de Lima (según las encuesta de la plataforma Lima Como Vamos).

Acá cabe hace un paréntesis con respecto al auto propio. Usar o adquirir un auto propio no es la solución pues generaría mucho mas tráfico vehicular de lo que ya teníamos antes de la pandemia. Acuérdense que Perú actualmente es el tercer país en el Mundo con mas congestión vehicular. Ello repercutiría en perder por lo menos dos horas diarias en el tráfico, aumentar el estrés y generar mas smog en las calles, lo que podría provocar otras enfermedades. 

La solución para las distancias largas queda en manos de los buses y corredores. Estos tendrán que disminuir su aforo a la tercera parte de lo que acostumbraban antes de la pandemia. Sin personas paradas y con asientos libres intercalados. 

La ATU (Autoridad de Transporte Urbano) ha publicado un documento que contiene el protocolo de uso para los buses, para mantener el distanciamiento físico (1):



Para ello el Estado tendrá que aumentar la flota de buses y subvencionará la perdida económica de las empresas de transporte, ya que al disminuir el aforo, y por tanto, el ingreso recibido de los pasajes,  estas empresas terminan perdiendo. 

Sin embargo, existen un problema: El distanciamiento físico entre los asientos termina siendo muy corto. Según un estudio realizado en China, y publicado por El Comercio (2), una persona infectada en un bus tiene un radio de contagio de 4 metros*. Dos o tres personas infectadas y sentadas de manera distancia podrían infectar a todos los pasajeros. 

*El estudio específica que el radio de contagio es de 4m con ventanas cerradas, pero en invierno se sacrificaría la comodidad por el frio, al abrir las ventanas.


PROPUESTAS EXCEPCIONALES PARA CASOS EXCEPCIONALES: EL CABINABUS

El problema en cuestión nos ha hecho re-pensar en la distribución interna de los buses, y sobretodo de los corredores. Y para ello, hemos pensado en la propuesta del "Cabina bus", que consiste en un vehículo con cabinas herméticas y protocolo sanitario, pare reducir el contagio del covid-19. 

El cabina bus cuenta con cabinas de policarbonato, que pueden tener uno o dos asientos (en caso se venga con acompañante), cada cabina tiene ventana para ventilar, y el pasadizo entre ellas cuenta con un metro de ancho. La cabina del chófer también está cerrada con policarbonato. Recordemos que este es el material que usan la cabinas de desinfección en diversas ciudades del Mundo. Incluso la misma ATU ha propuesto a los taxitas usar el policarbonato para no tener contacto con los pasajeros. 

Imagen 1: Cabina de análisis de Covid-19 en Corea de Sur / Imagen 2: Policarbonato en cabina de taxi.

Al ingresar cuenta con un lavabo  empotrado, similar a los de los Disal, para que las personas puedan lavarse con agua y jabón antes de ingresar al vehículo, luego pasaría por el tarjetero y molinete, para poder ingresar a la cabina disponible.
Al final del bus, hay un espacio opcional para camilla, botiquin y respirador. Esto es por si alguien empieza a sentir mal.
Opcionalmente, por un tema de energías renovables, el bus podría tener paneles solares en el techo, ello podría facilitar a que los usuarios puedan cargar sus celulares a través de tomas instaladas en en cada cabina.



Cabe especificar que esta propuesta se puede implementar en modelos de buses existentes para los corredores, de tal manera que se redistribuyan algunos componentes en su interior y se instalen algunos elementos nuevos como las planchas de policarbonato.

PERSONAL

El CabinaBus contaría con 2 trabajadores, por un lado el chofer, y por otro lado, un personal de desinfección y primeros auxilios, que este siempre desinfectando cada una de las cabinas cada vez que alguien salga de ellas, además que este capacitado de atender a alguien con problemas de respiración y pueda transportarlo y acomodarlo en la camilla del fondo del bus.

Podría evaluarse también que este personal de desinfección trabaje directamente con la ATU, de manera que ya no se necesiten 126 inspectores que cuenta actualmente. En otras palabras, esta persona sería a su vez inspector de la ATU que supervise que los protocolos se estén dando correctamente.

Cada CabinaBus tendría 2 trabajadores: El chofer y un agente multifuncional que organice la bajada de los pasajeros, desinfecte constantemente las cabinas y sepa de primeros auxilios. Este último podría ser un trabajador directo de la ATU. 

PROTOCOLOS
Como parte del Protocolo, solo podrían subir pasajeros en la medida que hayan cabinas disponibles. Para subir se tendría que lavar las manos, pagar en el tarjetero universal, pasar por el polinete y tomar una de las cabinas disponibles. En caso de que se venga acompañado (pareja, hijos) se puede tomar la cabina de 2 personas, si no se da el caso, esta cabina podría tomarla una sola persona. Las 2 cabinas delanteras además son preferenciales.

Para el caso de las bajadas, cada cabina tiene un botón de bajada y el personal tiene que organizar a las personas para que estas bajen manera distanciada. De preferencia que cada persona salga de su cabina por turnos.

Además cada cabina tendría también un botón de emergencia en caso una persona se sienta mal. En este caso, el personal, previa capacitación en primeros auxilios, tiene que llevarlo a la camilla del fondo, que contaría con botiquín de primeros auxilios, e idealmente un respirador, para luego contactar a los servicios médicos cercanos.

SUBSIDIOS
Al igual que los buses que funcionan en la actualidad con el protocolo de la ATU, el CabinaBus trabajaría bajo un sistema de subvenciones o subsidios del transporte urbano, poniendo la seguridad y comodidad de los usuarios por encima de las ganancias por mayor capacidad, y evitando que las empresas de transporte suban los pasajes de los buses por la disminución de aforo.
Esta subvención tiene carácter temporal, pero si la pandemia tiene para largo aliento, como algunos expertos de la OMS predican(3), habría que buscar una manera de hacerlo sostenible, quizás a través de la reducción del ISC (Impuesto Selectivo al Consumo) u otros mecanismos que permitan garantizar este servicio especial.

PARADEROS
Otro tema a repensar son los paraderos. Estos tienen que ser espacios amplios, de preferencia que agarren todo el largo de una cuadra para que puedan albergar las colas con distanciamiento físico de 2m entre las personas. Es recomendable usar pinturas o stickers de círculos en el suelo para marcar el distanciamiento seguro, como lo ha venido haciendo la ATU y algunas Municipalidades en algunos casos.

Los paraderos tienen que ser amplios y largos. En los paraderos principales y de mayor aglomeración se debe utilizar todo el largo de la cuadra. Imagen referencial: Intervención con círculos y personas en render de paradero de Transantiago.

Imagen: ATU

El problema en muchos casos de nuestra ciudad es que los paraderos son estrechos o no cuentan con la infraestructura adecuada para ampliar su área para el distanciamiento. En este caso, hay que implementar remodelaciones y ampliaciones con la ayuda del Municipio de Lima. Sin embargo, habrán casos excepcionales de paraderos que no tienen alternativa de expandirse, por lo que habrá que pensar en reubicarlos o dividirlos en dos (en última instancia, ya que no es conveniente porque reduce la velocidad de traslado). En todo caso, la ATU tendría que evaluar cada ruta y la capacidad/calidad de sus paraderos, de acuerdo a la demanda existente. Como se sabe, el teletrabajo y la educación a distancia va a reducir en parte el uso del transporte público, y eso ayudará a la descongestión.

Finalmente, esta propuesta del Cabina-Bus buscar ser un punto en común entre los modelos de ciudad verde (densa, ecológica) y ciudad saludable (biosegura, con distanciamiento físico) (4).

(1) Protocolo Sanitario Sectorial para la prevención del Covid-19 en el Servicio de Transporte Regular de Personas en el Ambito Provincial, por la Autoridad de Transporte Urbano.
(2) Historia de un contagio en una combi, artículo de Diario el Comercio
(3) OMS dice que el Coronavirus quizás nunca desaparecerá, nota vía Perú21
(4) Entrevista a Richard Sennett & Saskia Sassen, por el Espacio Fundación Telefónica de Madrid: Sennet menciona que la solución a la urbe poscovid va a estar en juntar los modelos de ciudad verde y ciudad saludable.

Texto: Gonzalo Díaz
Propuesta: Gonzalo Díaz / Fabio Rodríguez
Render Cabinabus: Fabio Rodríguez

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